Ella está completamente rota. Yo tengo la manía de querer repararlo todo. Ella es un perfecto desastre. Yo trato de estar planificada. Mi manía es el orden, y ella es un caos. Se aburre de la vida, habla del suicidio, nada la motiva excepto saltarse las reglas y ponerse al límite. Le gusta el peligro, a mí la cautela. El abismo vive en sus ojos. Y aunque somos tan diferentes, también somos inseparables. Sophia Pierce me habla del espacio, de otras vidas, de planetas. Y yo, supongo que soy su…